Con un diseño clásico y un acabado antiguo de gran riqueza visual, esta consola hecha a mano aporta un aire de elegancia atemporal a cualquier entorno. La cubierta es amplia y rematada por un borde superior limpio de corte tradicional, que enmarca la pieza con sobriedad.
Bajo el borde se disponen tres cajones rectangulares, cada uno con un recorte bien definido y una jaladera de hierro forjado colocada al centro, que resalta su carácter artesanal. En cada costado se integran paneles recortados de forma rectangular, manteniendo la armonía visual del conjunto.
La consola se apoya sobre cuatro encantadoras patas torneadas a mano, rematadas con detalles esféricos que aportan un toque refinado. Las patas están unidas por una sólida repisa inferior de madera maciza que mejora su funcionalidad sin comprometer la estética.
Fabricada con la mejor madera maciza sustentable disponible, esta pieza es completamente personalizable para adaptarse a tu estilo y necesidades.
