Este baúl artesanal de inspiración “western” destaca por su equilibrada combinación entre la calidez de la madera clara y el brillo característico del cobre martillado. El frente está adornado con cuatro paneles de cobre, trabajados a mano, cuyas superficies exhiben diseños repujados de volutas y motivos florales. Cada lateral incorpora un panel adicional con la misma técnica, aportando continuidad visual y riqueza ornamental.
La tapa rectangular, de borde recto, se abre para revelar un amplio espacio de almacenamiento. Está articulada mediante bisagras de hierro forjado, mientras que el broche frontal y la llave también han sido elaborados en forja tradicional, asegurando funcionalidad y coherencia estética.
La estructura descansa sobre patas cortas cuadradas que refuerzan la línea robusta del conjunto, y el marco ha sido construido con madera sólida de origen sostenible, terminada en un tono claro con efectos sutiles que resaltan su expresión artesanal.
Totalmente personalizable —desde los motivos en cobre hasta las dimensiones o acabados— esta pieza es ideal para integrarse en ambientes con carácter, tradición y equilibrio decorativo.